martes, 26 de julio de 2011

Inevitable, todo es tan inevitable.



Hay cosas que no se pueden controlar. Cosas que no dependen de ti. Algunas son muy simples y nos dan la vida, como el latir del corazón. Otras como el parpadeo y el estornudo son inevitables. Tampoco puedes controlar que pase el tiempo, que el segundo corra y tras él las horas. Pero de todas las cosas inevitables que existen la más inevitable es el querer.
Todo puede empezar por una simple sonrisa, darte cuenta que se ha cortado el pelo o simplemente sentir mariposas en la barriga cuando notas su olor cerca de ti. Pero sólo puede acabar de dos formas posibles; una de ellas es que acabe enamorado de ti hasta los huesos y la otra es que alguno de los dos acabe con un corazón roto y una mente corrompida.

2 comentarios:

  1. Hola!:)
    Me encanta tu blog, es preciosho <3
    te sigo va?
    & te dejo el mio por si te quieres pasar !
    http://amarnoseimprovissa.blogspot.com/

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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